sábado, 3 de noviembre de 2007

Hablo de increíbles muertes e incalculables alumbramientos. Esta circularidad y nosotros en medio, no controlo ni mis líquidos!! Todos suenan a sangre en erupción y a cajas negras y por azar las moscas, infecciosas palabras que entran en bocas abiertas y ella que está cayendo por intensa y abísmica.. me recuerda a alguien.
Por eso entrego mis tijeras, por ese segundo de descanso después del dolor de carnes cercenadas, insisto, por palabras de lluvia ácida y culpa, culpa como costras y después mil litros de hierba.

5 comentarios:

lina dijo...

ojala todas las culpas fueran como costras, asi dolerian menos, y serian solo marcas que se quedan y que de a poco desaparecen, sin dejar rastros a veces, y otras veces solo cicatrices insignificantes
.
hermoso lo tuyo
.
un beso!

Anónimo dijo...

hola


aca me tienes pues!!
y yo te leo no entre, sino desde y con mezcla cosmica de espejo antiguo.

te amo te extraño
linda

(pucha no alcanzaste a ver el ultimo, ese keria k vieras...)

andres gonzalez dijo...

en boca cerrada no entran ni moscas ni besos

Anónimo dijo...

mucho bien me han hecho tus palabras.

gracias paloma

Cristobal Vargas dijo...

no te coagules ni te disuelvas!
te kieri