lunes, 15 de diciembre de 2008

Nunca tan drogada como dios


Como entrar en un mundo de no-oír, me atrapo en nudos de too late y me inmenso de tanto suspiro y manos como cárceles y latidos de cementerio, actuando alguna vez como si fuera una, sólo una que se arranca de vez cuando y no mis miles a la vez...
Y no intento a veces, por no-segura y esa gente tan resuelta de la que desconfío por calculadora y física, muy física!!
Nunca el sol como fuego puro, siempre lleno de tierras y muslos desnudos que te rodean y sufren a veces. Nunca tan real y nunca tan drogada como dios.

Me imagino... y la infinita conexión.