martes, 27 de noviembre de 2007

Scheußlichkeit (Monstruosidad)


Y qué aspiro? si hay un ojo de buey y otro de gallo mirándome hacer cocimientos imposibles para curarme la imposibilidad, si respiro- a-veces-eso-cremoso-putrefacto-de-inicios y meto mi uña en mi fosa nasal para arrancar lo que sea que estorba en mi cerebro. No aspiro. Sigo respirando la asfixia, no hay más que lunares encaramados y esa que se empequeñece tras su arrogancia...
Hay un circo pobre que vuela en mi sangre.

viernes, 16 de noviembre de 2007

Der Donner von dir (o el trueno de tí)


So ist das... ewig, innerlich, absolut, zwei Bluttropfen und das verflochtene, zerbrechene Gehirn, nicht mehr als der Donner von dir.
Ich spiele und manchmal heiße ich Nessel, immer grün für dich, immer Schatten zwischen den Augen, immer Schein zwischen den Hauten.
(Así es... eterno, interno, absoluto, dos gotas de sangre y los sesos entrelazados y partidos, nada más que el trueno de tí.
Juego y a veces me llamo Ortiga, siempre verde para tí, siempre sombra entre los ojos, siempre brillo entre las pieles).

miércoles, 14 de noviembre de 2007

Sangre y burbuja


Escribíanme mis venas sin temporalidad y el juego y eso de "ser diferente" con rayos y todo, sangrábamos y nos cegábamos de pura obscuridad y en el último estertor fumábamos a ser brillantes y economizables.
Entremedio de cien árboles (que están flotando) tu calvicie dorada, y yo, llorando arterias y piel y pensando en la burbuja estelar, pisando la tierra y sintiendo el pulso que remece mi pierna y la enmudece.
Acabo de mundo y entrepierna, tres inhalaciones y me metes en tus pulmones. Soy voz susurrante.

miércoles, 7 de noviembre de 2007

Y cuando pienso en el stop, vientos verdes revuelven pupilas dulces, no sé si las mías, tal vez las tuyas, trapasan vacíos inofensivos, si es que podemos tratar a un vacío de inocuo.
No creo con esas cáscaras; se cierran, me clausuran la boca y ya no confío en las lágrimas.
Te alcanzo. Con la punta. Te alcanzo.

sábado, 3 de noviembre de 2007

Hablo de increíbles muertes e incalculables alumbramientos. Esta circularidad y nosotros en medio, no controlo ni mis líquidos!! Todos suenan a sangre en erupción y a cajas negras y por azar las moscas, infecciosas palabras que entran en bocas abiertas y ella que está cayendo por intensa y abísmica.. me recuerda a alguien.
Por eso entrego mis tijeras, por ese segundo de descanso después del dolor de carnes cercenadas, insisto, por palabras de lluvia ácida y culpa, culpa como costras y después mil litros de hierba.